Para todos aquellos emprendedores que estén comenzando con su propio negocio físico, como una tienda o un local de cualquier tipo, es imprescindible tenerlo dado de alta en Google My Business. Es posible que lo hagamos por nuestra cuenta o que un agente de Google nos visite para acompañarnos paso a paso mientras lo hacemos. Si lo hacemos sin ayuda, eso sí, deberíamos tener algunos aspectos en mente.
Aspectos fundamentales
Pensemos que la página de nuestro negocio en Google My Business será posiblemente lo primero que encuentre un posible cliente cuando busque el nombre de nuestro negocio en Google. Eso significa que la información que debe contener es la fundamental e imprescindible. Por ejemplo, el nombre del negocio, la categorización del mismo (como si se trata de un restaurante italiano), el teléfono y los horarios. Esos son datos imprescindibles que el cliente podrá necesitar cuando esté buscando más información del negocio. Es importante que toda esta información esté comprobada y que no exista ningún tipo de error.
Que nuestro negocio tenga bien localizado el número de la calle donde se encuentra implicará que los usuarios podrán llegar hasta él por medio de Google Maps, lo que será muy sencillo para aquellos casos en los que la tienda se encuentre un poco más difícil de localizar. Así mismo, ayudará a crear una mayor sencillez entre los visitantes para encontrarla.
Otros datos a incluir
También tenemos que crear un vínculo entre la información de Google y nuestra página web. Lo más posible es que esos mismos clientes que nos han buscado quieran saber algo más del trabajo que realizamos en el negocio. Por eso hay que conducirlos a nuestra página web y dar accesos directos a los distintos perfiles en las redes sociales. En este sentido recordemos la importancia de tener presencia en Facebook, Twitter y cada vez más en Instagram.
Otro elemento que nunca debería faltar en el perfil de Google My Business son fotografías de nuestro negocio, a ser posible que estén actualizadas y que ayuden a los visitantes a hacerse a la idea de lo que encontrarán en él. Esto podrá hacer que se decidan a visitarlo o no. Por eso también es bueno hacer fotos a los mejores productos que se comercializan. Un restaurante, por ejemplo, debería hacerle fotografías a algunos de sus platos que despierten el interés entre los clientes potenciales que se hayan interesado por él buscando online.
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